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10 febrero, 2015

Pais militarizado

La seguridad y paz que se siente en Bogotá es sorprendente, y el motivo es que la gente vive en paz, en contacto los unos con los otros, al aire libre, respetuosos. Imagino que habrá contribuido bastante una buena labor policial y su lucha para disminuir la delincuencia o quien sabe si desplazarla a otro sitio. Pero choca que dentro de la ciudad haya tanto ejército.


 

He visto otros países de Latinoamérica con mucha presencia militar, con partidas presupuestarias en Defensa que ofenden a la realidad socioeconómica que viven, pero tanto culto a lo militar dentro de la ciudad no lo había visto nunca. Ni siquiera en Chile.
Ya en la antigua Roma los ejércitos tenían prohibida la entrada en la ciudad estando obligados a acampar a las afueras en el campo de Marte (nota pedante de las que me molan a morir).

Los hay con todo tipo de uniformes y armas, pero aún no me atrevido a fotografiar a los que más intimidan, los que están en servicio con unos chalecos de 20kg y unas metralletas que dan miedito.
Los que están en edificios oficiales de guardia se aguantan y los fotografío.



Otros que no quieren, lo hago a escondidas o apuntando hacia arriba como si la foto fuera al edificio.


Esta foto me parece bastante ilustrativa. El militar armado hasta las trancas y la niña, ajena, paseando por la acera.








5 comentarios:

antoñito carretero dijo...

Me gusta el sistema y el respeto al ejercito, siempre que como me imagino y se vé, sea reciproco. Bonitas fotos

Silvia dijo...

Nos reenganchamos al blog hoy. ¡Qué bien escribes y qué interesante lo que cuentas! La anécdota de Freixa vs Roncero la tienes que superar pasándote por el restaurante. Sin duda, se ha quedado contigo, eso es lo que vale ;) Abrazote para Marta y para ti desde los madriles (I+S+V)

Anónimo dijo...

Pues aqui en Mexico con todo y ejercito sigue un ambiente de inseguridad bastante critico, la verdad es que si nuestros lideres no actuan rapida y eficazmente el pais esta condenado a un fracaso como Grecia.

Unknown dijo...

Por un lado, México es un estado fallido, con una dejadez por parte de sus ciudadanos que a veces se convierte en complicidad, pues la corrupción está metida en el mismo alma del mexicano y cree que "no vive tan mal".

Unknown dijo...

Silvia, gracias por tus palabras! Si tuviera vergüenza me ruborizaría, pero...soy yo, así que entiendo que te guste! ;-)
Seguid visitándole blog!