Posteriormente se produce un colapso de los músculos de la cara lo que provoca la imposibilidad de controlar la secreción salivar y mucho menos el control sobre la saliva. Se acaba cayendo la baba.
Eso si, con el tratamiento médico adecuado (cerveza, sal y limón) y el cariño de los colegas, la recuperación es rápida, quedando únicamente el trámite de descomer la papa al día siguiente siendo el único efecto secundario tener que sentarse sobre un flotador las siguientes 24h.
Ángel, ¡los colegas estamos contigo!
1 comentario:
Jajajaja pobre Angel!! Empezais pronto con problemillas d estomago. Cn esos enfermeros todo controlau chef! Viva Mexico Cabrones me matais de la envidia
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